Diez años después de que Brasil, Rusia, India y China fueron agrupados bajo la sigla colectiva de BRIC, cualquier ventaja para alguien que haya invertido temprano ha desaparecido. Pero a los amantes de siglas les aliviará descubrir que el tema más reciente en acaparar la atención sobre los mercados emergentes también tiene un nombre pegajoso: CIVETS (nombre en inglés de una especie de felino conocido en algunas partes como civeta o vivérrido).
El llamado grupo de países CIVETS —Colombia, Indonesia, Vietnam, Egipto, Turquía y Sudáfrica— son presentados como la próxima generación de tigres económicos, aun cuando llevan el nombre de un felino más tímido.
Estos países tienen poblaciones grandes y jóvenes con una edad promedio de 27 años. Esto significa que se beneficiarán del creciente consumo interno, o eso dice la teoría. También son economías de crecimiento rápido y relativamente diversas, lo cual significa que no deberían depender mucho de la demanda externa como los BRIC.
En mayo, HSBC Global Asset Management lanzó el primer fondo específicamente dirigido a estos países, el fondo HSBC GIF CIVETS. HSBC señala los crecientes niveles de inversión extranjera directa a todo el grupo, bajos niveles de deuda pública —excepto en Turquía— y calificaciones de crédito soberano que están avanzando al grado de inversión.
Los críticos dicen que los CIVETS no tienen nada en común fuera de sus poblaciones jóvenes. Más aun, agregan que la liquidez y el gobierno corporativo son disparejos y el riesgo político sigue siendo un factor, especialmente en Egipto.
"Esto me suena a truco", dice Darius McDermott, director gerente de Chelsea Financial Services. Al menos los países BRIC eran las cuatro mayores economías emergentes, por lo cual había cierta lógica para agruparlos. Un fondo general de mercados emergentes sería una manera menos riesgosa de conseguir una exposición similar".
Aun así, los números iniciales sugieren que los inversionistas en los CIVETS podrían prosperar. El índice S&P CIVETS 60, establecido en 2007, supera a los otros dos índices de mercados emergentes —el S&P BRIC 40 y el S&P Emerging BMI— por un lapso de un año y tres años.
COLOMBIA: Colombia está perfilándose como un destino atractivo para los inversionistas. Una mejor seguridad ha llevado a una caída de 90% en los secuestros y de 46% en la tasa de asesinatos en la última década, lo cual ha contribuido a que el Producto Interno Bruto per cápita se duplique desde 2002. Este año, la deuda soberana de Colombia fue promovida a grado de inversión por las tres agencias calificadoras.
Colombia tiene reservas sustanciales de petróleo, carbón y gas natural. La inversión extranjera directa sumó US$6.800 millones en 2010. A HSBC Global Asset Management le gusta Bancolombia SA, el mayor banco privado del país, que ha registrado un retorno sobre el capital de más de 19% en cada uno de los últimos ocho años.
INDONESIA: el cuarto país más populoso del mundo aguantó la crisis financiera global mejor que la mayoría, gracias a su gigantesco mercado interno. Tras crecer 4,5% en 2009, repuntó sobre la marca de 6% el año pasado y se prevé que se mantenga allí durante los próximos años. Su calificación de deuda soberana ha ascendido a un escalón por debajo del grado de inversión en el último año.
Aun cuando Indonesia tiene costos laborales bajos, la corrupción es un problema. Algunos gerentes de fondos creen que la exposición se logra mejor mediante subsidiarias locales de multinacionales. Andy Brown, gerente de inversión de Aberdeen Asset Management, tiene en su cartera PT Astra International, un conglomerado automotriz controlado por Jardine Matheson Group.
VIETNAM: Vietnam ha sido una de las economías de más rápido crecimiento del mundo en los últimos 20 años y el Banco Mundial prevé una expansión de 6% este año, que subirá a 7,2% en 2013. Su proximidad a China ha llevado a considerarlo como un potencial eje fabril.
Pero el Vietnam comunista apenas ingreso a la Organización Mundial del Comercio en 2007. "La realidad es que la inversión en Vietnam es todavía un proceso muy laborioso", dice Brown.
EGIPTO: La revolución puede haber frenado la economía egipcia —el Banco Mundial predice un crecimiento de apenas 1% este año, comparado con 5,2% el año pasado— pero los analistas esperan que recupere su trayectoria de crecimiento cuando vuelva la estabilidad política.
Los muchos activos de Egipto incluyen puertos de rápido crecimiento en el Mediterráneo y en el Mar Rojo vinculados por el Canal de Suez y sus vastos recursos inexplotados de gas natural.
TURQUÍA: Ubicada entre Europa y grandes productores de energía en Oriente Medio, el Mar Caspio y Rusia, Turquía tiene grandes proyectos de gasoductos que lo convierten en un importante corredor entre Europa y Asia Central. El Banco Mundial predice un crecimiento de 6,1% este año y un retroceso a 5,3% en 2013.
Phil Poole, de HSBC Global Asset Management, califica la aerolínea nacional Türk Hava Yolları de buena inversión, en tanto Brown prefiere el minorista BIM Birlesik Magazalar A.S., de rápido crecimiento, y Anadolu Group, propietario de la cervecera Efes Beer Group.
SUDÁFRICA: El alza de los precios de las materias primas, la demanda renovada en sus sectores automotriz y químico y el gasto en el mundial de fútbol han ayudado a Sudáfrica —una economía diversificada rica en recursos como el oro y el platino— a reanudar el crecimiento tras una recesión l. Muchos consideran el país una puerta de entrada a la inversión en el resto de África.
HSBC prevé potencial de crecimiento de largo plazo en la firma de minería, energía y química Sasol Ltd.
Estos países tienen poblaciones grandes y jóvenes con una edad promedio de 27 años. Esto significa que se beneficiarán del creciente consumo interno, o eso dice la teoría. También son economías de crecimiento rápido y relativamente diversas, lo cual significa que no deberían depender mucho de la demanda externa como los BRIC.
En mayo, HSBC Global Asset Management lanzó el primer fondo específicamente dirigido a estos países, el fondo HSBC GIF CIVETS. HSBC señala los crecientes niveles de inversión extranjera directa a todo el grupo, bajos niveles de deuda pública —excepto en Turquía— y calificaciones de crédito soberano que están avanzando al grado de inversión.
Los críticos dicen que los CIVETS no tienen nada en común fuera de sus poblaciones jóvenes. Más aun, agregan que la liquidez y el gobierno corporativo son disparejos y el riesgo político sigue siendo un factor, especialmente en Egipto.
"Esto me suena a truco", dice Darius McDermott, director gerente de Chelsea Financial Services. Al menos los países BRIC eran las cuatro mayores economías emergentes, por lo cual había cierta lógica para agruparlos. Un fondo general de mercados emergentes sería una manera menos riesgosa de conseguir una exposición similar".
Aun así, los números iniciales sugieren que los inversionistas en los CIVETS podrían prosperar. El índice S&P CIVETS 60, establecido en 2007, supera a los otros dos índices de mercados emergentes —el S&P BRIC 40 y el S&P Emerging BMI— por un lapso de un año y tres años.
COLOMBIA: Colombia está perfilándose como un destino atractivo para los inversionistas. Una mejor seguridad ha llevado a una caída de 90% en los secuestros y de 46% en la tasa de asesinatos en la última década, lo cual ha contribuido a que el Producto Interno Bruto per cápita se duplique desde 2002. Este año, la deuda soberana de Colombia fue promovida a grado de inversión por las tres agencias calificadoras.
Colombia tiene reservas sustanciales de petróleo, carbón y gas natural. La inversión extranjera directa sumó US$6.800 millones en 2010. A HSBC Global Asset Management le gusta Bancolombia SA, el mayor banco privado del país, que ha registrado un retorno sobre el capital de más de 19% en cada uno de los últimos ocho años.
INDONESIA: el cuarto país más populoso del mundo aguantó la crisis financiera global mejor que la mayoría, gracias a su gigantesco mercado interno. Tras crecer 4,5% en 2009, repuntó sobre la marca de 6% el año pasado y se prevé que se mantenga allí durante los próximos años. Su calificación de deuda soberana ha ascendido a un escalón por debajo del grado de inversión en el último año.
Aun cuando Indonesia tiene costos laborales bajos, la corrupción es un problema. Algunos gerentes de fondos creen que la exposición se logra mejor mediante subsidiarias locales de multinacionales. Andy Brown, gerente de inversión de Aberdeen Asset Management, tiene en su cartera PT Astra International, un conglomerado automotriz controlado por Jardine Matheson Group.
VIETNAM: Vietnam ha sido una de las economías de más rápido crecimiento del mundo en los últimos 20 años y el Banco Mundial prevé una expansión de 6% este año, que subirá a 7,2% en 2013. Su proximidad a China ha llevado a considerarlo como un potencial eje fabril.
Pero el Vietnam comunista apenas ingreso a la Organización Mundial del Comercio en 2007. "La realidad es que la inversión en Vietnam es todavía un proceso muy laborioso", dice Brown.
EGIPTO: La revolución puede haber frenado la economía egipcia —el Banco Mundial predice un crecimiento de apenas 1% este año, comparado con 5,2% el año pasado— pero los analistas esperan que recupere su trayectoria de crecimiento cuando vuelva la estabilidad política.
Los muchos activos de Egipto incluyen puertos de rápido crecimiento en el Mediterráneo y en el Mar Rojo vinculados por el Canal de Suez y sus vastos recursos inexplotados de gas natural.
TURQUÍA: Ubicada entre Europa y grandes productores de energía en Oriente Medio, el Mar Caspio y Rusia, Turquía tiene grandes proyectos de gasoductos que lo convierten en un importante corredor entre Europa y Asia Central. El Banco Mundial predice un crecimiento de 6,1% este año y un retroceso a 5,3% en 2013.
Phil Poole, de HSBC Global Asset Management, califica la aerolínea nacional Türk Hava Yolları de buena inversión, en tanto Brown prefiere el minorista BIM Birlesik Magazalar A.S., de rápido crecimiento, y Anadolu Group, propietario de la cervecera Efes Beer Group.
SUDÁFRICA: El alza de los precios de las materias primas, la demanda renovada en sus sectores automotriz y químico y el gasto en el mundial de fútbol han ayudado a Sudáfrica —una economía diversificada rica en recursos como el oro y el platino— a reanudar el crecimiento tras una recesión l. Muchos consideran el país una puerta de entrada a la inversión en el resto de África.
HSBC prevé potencial de crecimiento de largo plazo en la firma de minería, energía y química Sasol Ltd.
fuente wall street journal :http://online.wsj.com/article/SB10001424053111904106704576583273284947908.html?mod=WSJS_mercados_MiddleTop